Nace un nuevo centro de investigación en ingeniería de motores de biocombustibles

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Agência FAPESP* –Por Elton Alisson
Agência FAPESP – La FAPESP y Peugeot Citroën de Brasil (PCBA) suscribieron el día 4 de noviembre un término referente a un convenio de cooperación con la Universidad de São Paulo (USP), la Universidad de Campinas (Unicamp), el Instituto Tecnológico de Aeronáutica (ITA) y el Instituto Mauá de Tecnología (IMT) para el lanzamiento del Centro de Investigación en Ingeniería Profesor Urbano Ernesto Stumpf.
Este centro de investigación se destinará al desarrollo de motores de combustión interna adaptados o desarrollados específicamente para biocombustibles, y a estudios sobre la sostenibilidad de los biocombustibles.
Entre los temas que se investigarán se encuentran las nuevas configuraciones de motores de biocombustibles, los vehículos híbridos, la reducción del consumo, la emisión de gases y sus impactos y la factibilidad económica y ambiental de los biocombustibles.
“El convenio de cooperación permitirá la convergencia y la interacción entre Peugeot Citroën, la FAPESP y universidades e instituciones de investigación que actuarán en red y harán aportes específicos en sus áreas de especialización para el desarrollo de motores de biocombustibles”, dijo Celso Lafer, presidente de la FAPESP, durante el acto de firma del término referente al convenio.
El centro tendrá su sede en la Facultad de Ingeniería Mecánica de la Unicamp y estará integrado por investigadores de dicha universidad, del Laboratorio de Ingeniería Térmica y Ambiente (Lete) de la Escuela Politécnica de la USP (Poli-USP), del Laboratorio de Combustión, Propulsión y Energía (LCPE) del ITA y del Laboratorio de Motores y Vehículos del IMT.
Los científicos de las cuatro instituciones desarrollarán estudios en sus áreas específicas de especialización de manera integrada.
El grupo del Laboratorio de Motores y Vehículos del IMT, por ejemplo, se dedicará a ensayos de motores, área en la cual tiene un largo historial. En tanto, los grupos de investigadores del Lete y del LCPE se abocarán a estudiar la fenomenología básica de la combustión.
“La integración de esos diferentes grupos de investigación constituirá uno de los mayores desafíos para la construcción del centro”, declaró Waldyr Gallo, docente del Departamento de Ingeniería Mecánica de la Unicamp y coordinador del proyecto, a Agência FAPESP.
“La idea es aprovechar y hacer avanzar las investigaciones que cada uno de ellos realiza, desde distintos aspectos de la ingeniería de motores, para avanzar en el desarrollo de motores de biocombustibles”, dijo.
La interacción con las universidades
La propuesta coordinada por Waldyr Gallo fue seleccionada a partir de un llamado a la presentación de propuestas emitido en el marco del acuerdo de cooperación en investigación firmado en 2012 entre la FAPESP y PCBA.
La inversión será de alrededor de 32 millones de reales durante un período de 10 años: 8 millones de reales de la FAPESP, 8 millones de reales de PCBA y aproximadamente 16 millones de reales en gastos operativos y sueldos pagados por las instituciones de investigación participantes.
El desarrollo de las investigaciones del centro contará con un seguimiento a cargo de un comité internacional formado por científicos del Institut des Sciences et Technologies (ParisTech) de Francia; del Instituto Politécnico de Turín, en Italia, y de las universidades de Cambridge y College London (Reino Unido) y Técnica de Darmstadt (Alemania).
“El Centro de Investigación en Ingeniería une características del programa de Centros de Investigación, Innovación y Difusión (CEPID) con las del Programa FAPESP de Investigación en Asociación para la Innovación Tecnológica, el PITE, lanzado en 1995 con el objetivo de estimular la realización de proyectos de investigación entre científicos de universidades y de empresas”, dijo Carlos Henrique de Brito de Cruz, director científico de la FAPESP.
“La idea es que el centro empiece a funcionar mediante una interacción intensa entre la empresa y las universidades e instituciones de investigación participantes. Por eso una de las reglas que establecimos fue que el centro tuviese además de un coordinador, un coordinador adjunto, nominado por Peugeot, que estará vinculado a la Unicamp en calidad de profesor visitante y podrá dar clases y dirigir estudiantes durante el proyecto”, afirmó.
El profesional que asumirá esa función será Franck Turkovics, gerente de Ingeniería de Powertrain y Biocombustibles de PSA Peugeot Citroën.
“La interacción entre Peugeot Citroën y las universidades e instituciones de investigación participantes del Centro de Investigación en Ingeniería será fundamental para que logremos desarrollar un motor optimizado con el fin de utilizar eficientemente el etanol, por ejemplo”, sostuvo Turkovics.
 


El motor de etanol
De acuerdo con datos dados a conocer durante el evento, con la paralización de la fabricación de motores dedicados de etanol en Brasil, en 2006 –cuando los vehículos flex fuel pasaron a liderar el parque de automóviles–, se suspendieron las investigaciones y el desarrollo de productos en el área.
La meta del Centro de Investigación en Ingeniería consiste en retomar los estudios y desarrollos en el área y probar tecnologías que hasta ahora no se han utilizado en motores de etanol, como la de inyección directa.
“Los motores dedicados de etanol pueden trabajar con tasas de compresión más elevadas y tener una mayor velocidad de quema que la gasolina”, dijo Gallo. “La combinación de diferentes tecnologías contribuirá para aumentar la eficiencia de los motores dedicados de etanol.”
No obstante, el investigador puso de relieve que el objetivo del Centro consiste en avanzar en el conocimiento sobre el uso de biocombustibles en general, y no solamente del etanol.
“El primer programa de investigación estará enfocado en la evaluación y el uso de motores de etanol para vehículos comerciales livianos o pesados. Pero el objetivo a largo plazo consiste en avanzar en el estudio de otros biocombustibles”, dijo Gallo.
Según el investigador, la meta es desarrollar un motor de biocombustible que se acerque a los motores diésel en términos de eficiencia de uso del combustible.
“Si logramos desarrollar un motor de biocombustible que se acerque a los motores diésel en términos de eficiencia, éste podrá convertirse en un producto con un nicho de mercado que competirá con los motores diésel y no con los de gasolina, tal como sucede actualmente con los motores flex fuel”, sostuvo.
A su juicio, los motores flex fuel del mercado brasileño han rodado mayoritariamente con gasolina, en razón de que el etanol no se distribuye en todas las regiones del país y de que los motores no han sido optimizados para el uso de ese biocombustible.
“En rigor, los motores flex fuel no podrían haber sido optimizados para el uso de etanol pues la mayor parte de esos vehículos está rodando con gasolina”, dijo Gallo.
También tomaron parte en la ceremonia de suscripción del término de convenio de cooperación Eduardo Moacyr Krieger, vicepresidente, y José Arana Varela, director presidente del Consejo Técnico Administrativo (CTA) de la FAPESP, y Emmanuel Hédouin, gerente de investigación e ingeniería avanzada de PSA Peugeot Citroën de Brasil.

<p><b>Por Elton Alisson</b></p>
<p><b>Agência FAPESP</b> – La FAPESP y Peugeot Citroën de Brasil (PCBA) suscribieron el día 4 de noviembre un término referente a un convenio de cooperación con la Universidad de São Paulo (USP), la Universidad de Campinas (Unicamp), el Instituto Tecnológico de Aeronáutica (ITA) y el Instituto Mauá de Tecnología (IMT) para el lanzamiento del Centro de Investigación en Ingeniería Profesor Urbano Ernesto Stumpf.</p>
<p>Este centro de investigación se destinará al desarrollo de motores de combustión interna adaptados o desarrollados específicamente para biocombustibles, y a estudios sobre la sostenibilidad de los biocombustibles.</p>
<p>Entre los temas que se investigarán se encuentran las nuevas configuraciones de motores de biocombustibles, los vehículos híbridos, la reducción del consumo, la emisión de gases y sus impactos y la factibilidad económica y ambiental de los biocombustibles.</p>
<p>“El convenio de cooperación permitirá la convergencia y la interacción entre Peugeot Citroën, la FAPESP y universidades e instituciones de investigación que actuarán en red y harán aportes específicos en sus áreas de especialización para el desarrollo de motores de biocombustibles”, dijo Celso Lafer, presidente de la FAPESP, durante el acto de firma del término referente al convenio.</p>
<p>El centro tendrá su sede en la Facultad de Ingeniería Mecánica de la Unicamp y estará integrado por investigadores de dicha universidad, del Laboratorio de Ingeniería Térmica y Ambiente (Lete) de la Escuela Politécnica de la USP (Poli-USP), del Laboratorio de Combustión, Propulsión y Energía (LCPE) del ITA y del Laboratorio de Motores y Vehículos del IMT.</p>
<p>Los científicos de las cuatro instituciones desarrollarán estudios en sus áreas específicas de especialización de manera integrada.</p>
<p>El grupo del Laboratorio de Motores y Vehículos del IMT, por ejemplo, se dedicará a ensayos de motores, área en la cual tiene un largo historial. En tanto, los grupos de investigadores del Lete y del LCPE se abocarán a estudiar la fenomenología básica de la combustión.</p>
<p>“La integración de esos diferentes grupos de investigación constituirá uno de los mayores desafíos para la construcción del centro”, declaró Waldyr Gallo, docente del Departamento de Ingeniería Mecánica de la Unicamp y coordinador del proyecto, a <b>Agência FAPESP</b>.</p>
<p>“La idea es aprovechar y hacer avanzar las investigaciones que cada uno de ellos realiza, desde distintos aspectos de la ingeniería de motores, para avanzar en el desarrollo de motores de biocombustibles”, dijo.</p>
<p><b>La interacción con las universidades</b></p>
<p>La propuesta coordinada por Waldyr Gallo fue seleccionada a partir de un <b><a href="http://www.fapesp.br/7350" target="_blank">llamado a la presentación de propuestas</a></b> emitido en el marco del <b><a href="http://www.fapesp.br/7358" target="_blank">acuerdo de cooperación</a></b> en investigación firmado en 2012 entre la FAPESP y PCBA.</p>
<p>La inversión será de alrededor de 32 millones de reales durante un período de 10 años: 8 millones de reales de la FAPESP, 8 millones de reales de PCBA y aproximadamente 16 millones de reales en gastos operativos y sueldos pagados por las instituciones de investigación participantes.</p>
<p>El desarrollo de las investigaciones del centro contará con un seguimiento a cargo de un comité internacional formado por científicos del Institut des Sciences et Technologies (ParisTech) de Francia; del Instituto Politécnico de Turín, en Italia, y de las universidades de Cambridge y College London (Reino Unido) y Técnica de Darmstadt (Alemania).</p>
<p>“El Centro de Investigación en Ingeniería une características del programa de Centros de Investigación, Innovación y Difusión (<b><a href="http://cepid.fapesp.br/home/" target="_blank">CEPID</a></b>) con las del Programa FAPESP de Investigación en Asociación para la Innovación Tecnológica, el <b><a href="http://fapesp.br/pite/" target="_blank">PITE</a></b>, lanzado en 1995 con el objetivo de estimular la realización de proyectos de investigación entre científicos de universidades y de empresas”, dijo Carlos Henrique de Brito de Cruz, director científico de la FAPESP.</p>
<p>“La idea es que el centro empiece a funcionar mediante una interacción intensa entre la empresa y las universidades e instituciones de investigación participantes. Por eso una de las reglas que establecimos fue que el centro tuviese además de un coordinador, un coordinador adjunto, nominado por Peugeot, que estará vinculado a la Unicamp en calidad de profesor visitante y podrá dar clases y dirigir estudiantes durante el proyecto”, afirmó.</p>
<p>El profesional que asumirá esa función será Franck Turkovics, gerente de Ingeniería de <i>Powertrain</i> y Biocombustibles de PSA Peugeot Citroën.</p>
<p>“La interacción entre Peugeot Citroën y las universidades e instituciones de investigación participantes del Centro de Investigación en Ingeniería será fundamental para que logremos desarrollar un motor optimizado con el fin de utilizar eficientemente el etanol, por ejemplo”, sostuvo Turkovics.<br />
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El motor de etanol</b></p>
<p>De acuerdo con datos dados a conocer durante el evento, con la paralización de la fabricación de motores dedicados de etanol en Brasil, en 2006 –cuando los vehículos <i>flex fuel</i> pasaron a liderar el parque de automóviles–, se suspendieron las investigaciones y el desarrollo de productos en el área.</p>
<p>La meta del Centro de Investigación en Ingeniería consiste en retomar los estudios y desarrollos en el área y probar tecnologías que hasta ahora no se han utilizado en motores de etanol, como la de inyección directa.</p>
<p>“Los motores dedicados de etanol pueden trabajar con tasas de compresión más elevadas y tener una mayor velocidad de quema que la gasolina”, dijo Gallo. “La combinación de diferentes tecnologías contribuirá para aumentar la eficiencia de los motores dedicados de etanol.”</p>
<p>No obstante, el investigador puso de relieve que el objetivo del Centro consiste en avanzar en el conocimiento sobre el uso de biocombustibles en general, y no solamente del etanol.</p>
<p>“El primer programa de investigación estará enfocado en la evaluación y el uso de motores de etanol para vehículos comerciales livianos o pesados. Pero el objetivo a largo plazo consiste en avanzar en el estudio de otros biocombustibles”, dijo Gallo.</p>
<p>Según el investigador, la meta es desarrollar un motor de biocombustible que se acerque a los motores diésel en términos de eficiencia de uso del combustible.</p>
<p>“Si logramos desarrollar un motor de biocombustible que se acerque a los motores diésel en términos de eficiencia, éste podrá convertirse en un producto con un nicho de mercado que competirá con los motores diésel y no con los de gasolina, tal como sucede actualmente con los motores <i>flex fuel</i>”, sostuvo.</p>
<p>A su juicio, los motores <i>flex fuel</i> del mercado brasileño han rodado mayoritariamente con gasolina, en razón de que el etanol no se distribuye en todas las regiones del país y de que los motores no han sido optimizados para el uso de ese biocombustible.</p>
<p>“En rigor, los motores <i>flex fuel</i> no podrían haber sido optimizados para el uso de etanol pues la mayor parte de esos vehículos está rodando con gasolina”, dijo Gallo.</p>
<p>También tomaron parte en la ceremonia de suscripción del término de convenio de cooperación Eduardo Moacyr Krieger, vicepresidente, y José Arana Varela, director presidente del Consejo Técnico Administrativo (CTA) de la FAPESP, y Emmanuel Hédouin, gerente de investigación e ingeniería avanzada de PSA Peugeot Citroën de Brasil.</p>
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