Con el apoyo de la FAPESP y del Banco Industrial do Brasil, el Centro Nacional de Investigación e Innovación en Salud Mental de la Universidad de São Paulo se inauguró en el marco de un evento realizado el 15 de marzo (foto: jcomp/Freepik)
Con el apoyo de la FAPESP y del Banco Industrial do Brasil, el Centro Nacional de Investigación e Innovación en Salud Mental de la Universidad de São Paulo se inauguró en el marco de un evento realizado el 15 de marzo
Con el apoyo de la FAPESP y del Banco Industrial do Brasil, el Centro Nacional de Investigación e Innovación en Salud Mental de la Universidad de São Paulo se inauguró en el marco de un evento realizado el 15 de marzo
Con el apoyo de la FAPESP y del Banco Industrial do Brasil, el Centro Nacional de Investigación e Innovación en Salud Mental de la Universidad de São Paulo se inauguró en el marco de un evento realizado el 15 de marzo (foto: jcomp/Freepik)
Por José Tadeu Arantes | Agência FAPESP – El Centro Nacional de Investigación e Innovación en Salud Mental (CISM) quedó inaugurado oficialmente el pasado 15 de marzo, en un evento realizado en São Paulo (Brasil), en el Instituto de Psiquiatría del Hospital de Clínicas (HC) de la ciudad, el complejo hospitalario administrado por la Facultad de Medicina de la Universidad de São Paulo (FM-USP).
El CISM, una iniciativa conjunta del Departamento de Psiquiatría de la FM-USP y de la FAPESP, combinará las actividades de investigación en busca de los factores que originan y precipitan los trastornos mentales con el desarrollo de intervenciones digitales tendientes a promover la salud mental de la población de manera más innovadora y escalable. Asimismo, se destina a estudiar la implementación de intervenciones probadamente efectivas en el SUS (el Sistema Único de Salud, la red nacional de salud pública de Brasil), de manera tal de asegurar que el conocimiento generado por la ciencia en el ámbito de la salud mental se traduzca en beneficios reales para la población.
El nuevo centro congrega a investigadores de las facultades de Medicina de la USP, de la Universidad Federal de São Paulo (Unifesp) y de la Universidad Federal de Rio Grande do Sul (UFRGS), las más productivas en salud mental de América Latina, y cuenta de entrada con un significativo abanico de colaboraciones o asesorías internacionales, entre ellas las de las universidades Harvard y Yale, en Estados Unidos.
Aparte del sustancial aporte financiero de la FAPESP, su creación contó con recursos del Banco Industrial do Brasil (BIB). En el ámbito de la FAPESP, el CISM tendrá su lugar entre los Centros de Investigaciones en Ingeniería/Centros de Investigación Aplicada (CPE/CPA) que la Fundación mantiene.
En su conferencia durante el evento, Eurípedes Constantino Miguel Filho, subjefe del Departamento de Psiquiatría de la FM-USP y coordinador del proyecto, informó pormenorizadamente cómo se estructurarán los tres ejes del CISM.
“En el Eje I, ‘Neurociencia poblacional’, tendremos un estudio de cohorte [seguimiento de un grupo de voluntarios] que apuntará a identificar los factores de riesgo importantes en el origen de los trastornos mentales. En el Eje II, ‘Intervenciones digitales’, apuntamos a crear un ambiente de innovación en cuyo marco identifiquemos las necesidades de la población en salud mental, diseñar prototipos y desarrollar aplicaciones que puedan dar cuenta de estos problemas, y probarlos como es debido desde el punto de vista de su eficacia clínica. En el Eje III, ‘Ciencia de la implementación’, pretendemos implementar intervenciones basadas en evidencias en el Sistema Único de Salud de dos ciudades del estado de São Paulo, Jaguariúna y Indaiatuba. El objetivo final consiste en ofrecer soluciones probadas para su propagación por el país y su implementación como políticas públicas”, dijo.
Una referencia internacional
Se espera que el modelo del CISM no solamente vaya más allá de los límites paulistas, al incentivar la creación de iniciativas análogas en otros estados brasileños, sino que también se convierta en una referencia internacional, fundamentalmente –aunque no únicamente− para países de bajos y medianos ingresos per cápita.
Miguel Filho recordó que los trastornos mentales afectan a alrededor del 30 % de la población en la megalópolis de São Paulo. Este porcentaje surgió en una investigación realizada hace más de diez años, pero sigue siendo referencia en el área.
“Asimismo, entre todas las condiciones médicas, los trastornos mentales cobran relevancia al representar una gran carga de enfermedad para la población, por ser frecuentes, por aparecer tempranamente en la vida y por causar incapacidad y sufrimiento”, remarcó.
Un dato casi siempre ignorado indica que los trastornos mentales tienen un comienzo precoz, con su pico de incidencia entre los 14 y 15 años de edad. Por otra parte, el acceso al tratamiento es limitado. Un estudio en el cual se utilizó una base de datos de más de 60 mil personas en Brasil demostró que, con ocasión del mismo, solamente el 20 % de las personas con depresión había accedido a algún tipo de tratamiento. Y que un porcentaje importante de la población más vulnerable no contaba con ayuda. Esas cifras ponen de relieve aún más la importancia del CISM para el sistema de salud brasileño.
Al proseguir la presentación del nuevo centro, Luis Augusto Rohde, profesor titular del Departamento de Psiquiatría y Medicina Legal de la UFRGS, desarrolló el tema de las tecnologías digitales en el ámbito de la salud mental, contemplado en el Eje II. Y afirmó que, si bien las aplicaciones dedicadas a la salud mental han hecho eclosión en el mercado, solamente el 2 % está respaldado por investigaciones. “Asimismo, el 90 % de los usuarios abandona las aplicaciones en un lapso de diez días”, sostuvo.
La propuesta de creación del “Hub Salud Mental Digital” apunta a superar ese panorama, al convertirse en un centro de referencia nacional para la incubación y la aceleración de soluciones digitales innovadoras en salud mental. Y también se pretende establecer un centro de acreditación de soluciones digitales innovadoras en salud mental en colaboración con el INOVA-HC (el núcleo de innovación tecnológica del hospital).
Los pormenores del Eje III estuvieron a cargo de Paulo Rossi Menezes, profesor titular del Departamento de Medicina Preventiva de la Facultad de Medicina de Ribeirão Preto (FMRP-USP), quien informó que aproximadamente el 50 % de las intervenciones médicas que tienen eficacia científicamente comprobada no llega a la práctica clínica. Y que el tiempo promedio necesario para su implementación es de alrededor de 20 años. Es decir que no basta con producir conocimiento de calidad: es necesario saber cómo ponerlo en práctica, lo cual hace de la propia implementación una ciencia.
Aparte de Miguel Filho, Rohde y Menezes, la coordinación del CISM cuenta con la participación de Jair de Jesus Mari, profesor titular del Departamento de Psiquiatría de la Unifesp.
En el evento de lanzamiento, entre las distintas autoridades se hicieron presentes Vahan Agopyan, secretario de Ciencia, Tecnología e Innovación del Estado de São Paulo, Carlos Gilberto Carlotti Júnior, rector de la USP, Eloisa de Oliveira Bonfá, directora de la FM-USP, Carlos Alberto Mansur, CEO del BIB, Marco Antonio Zago, presidente del Consejo Superior de la FAPESP, y Luiz Eugênio Mello, director científico de la Fundación.
Zago comentó que la propuesta original del CISM, que venía con la donación privada del BIB, no correspondía exactamente al modelo de los CPE/CPA, que es en la actualidad el mayor programa de cooperación entre universidades y empresas de Brasil, con una inversión de 1.500 millones de reales.
“El profesor Luiz Eugênio Mello trabajó intensamente junto a Carlos Américo Pacheco, director presidente de la FAPESP, para formatear ese centro que estamos presentando aquí, ahora. Y esto es lo yo quiero celebrar: la capacidad de nuestros distintos actores para obtener los resultados que le interesan a la sociedad”, subrayó Zago.
Imagen de jcomp en Freepik
The Agency FAPESP licenses news via Creative Commons (CC-BY-NC-ND) so that they can be republished free of charge and in a simple way by other digital or printed vehicles. Agência FAPESP must be credited as the source of the content being republished and the name of the reporter (if any) must be attributed. Using the HMTL button below allows compliance with these rules, detailed in Digital Republishing Policy FAPESP.