El recorte poblacional de la capital paulista y de la zona de Barretos investigada apuntó una disparidad en las cifras de muertos por afecciones tumorales dependiendo del color de piel declarado (foto: Rovena Rosa/Agência Brasil)
En 18 municipios de esa zona del interior de ese estado brasileño, con una población negra menor, los tumores matan más a esa parte de la población, mientras que en la mayor metrópolis del país mueren más los blancos, de acuerdo con un estudio en el cual se compararon las tasas de mortalidad a causa de esta enfermedad y que señala direcciones con miras a disminuir las desigualdades en el diagnóstico y en el tratamiento
En 18 municipios de esa zona del interior de ese estado brasileño, con una población negra menor, los tumores matan más a esa parte de la población, mientras que en la mayor metrópolis del país mueren más los blancos, de acuerdo con un estudio en el cual se compararon las tasas de mortalidad a causa de esta enfermedad y que señala direcciones con miras a disminuir las desigualdades en el diagnóstico y en el tratamiento
El recorte poblacional de la capital paulista y de la zona de Barretos investigada apuntó una disparidad en las cifras de muertos por afecciones tumorales dependiendo del color de piel declarado (foto: Rovena Rosa/Agência Brasil)
Por André Julião | Agência FAPESP – Los mejores Índices de Desarrollo Humano (IDH) y la menor representatividad de las personas negras en la población del interior del estado de São Paulo (Brasil) no son óbice para que ese grupo muera más de cáncer en la zona de Barretos que en la capital paulista, según se consigna en un estudio apoyado por la FAPESP y publicado en la revista Cancer Causes & Control.
En las 18 ciudades del departamento regional de salud de Barretos, los negros mueren un 18 % más que los blancos cuando se consideran todos los tipos de cáncer. Lo propio vale para los seis principales tumores. Aun cuando los de estómago, colorrectales y de pulmón no muestran grandes diferencias, los de mama (un 18 %) y del cuello uterino (un 63 %) representan una mortalidad mucho mayor en ese grupo étnico. Con respecto al cáncer de próstata, los negros mueren un 51 % más que los blancos en aquella parte del estado de São Paulo.
El período analizado se extiende desde el año 2001 hasta el año 2017, con base en datos de mortalidad del SUS (las siglas del “Sistema Único de Salud”, la red nacional de salud pública de Brasil), en los cuales figura la declaración personal de color de los pacientes. En ambas áreas analizadas, los tumores de pulmón constituyeron la principal causa de muertes por cáncer entre blancos, negros y pardos. Entre los descendientes de asiáticos, a la cabeza se ubicaron las muertes por cáncer colorrectal. Las mujeres negras y pardas murieron más por cáncer del cuello uterino que las mujeres blancas.
“Cuando se considera la cuestión histórica en Brasil, la esclavitud y sus reflejos hasta los días actuales, como el mayor acceso de los blancos a la riqueza y a los servicios de salud, este resultado es el esperable. La sorpresa provino del municipio de São Paulo, en donde las personas blancas mueren más por todos los tipos de cáncer juntos”, afirma Adeylson Guimarães Ribeiro, director adjunto de Información y Epidemiología de la Fundación Oncocentro de São Paulo (Fosp), autor principal del estudio.
Los blancos de la ciudad de São Paulo mueren un 19 % más de cáncer que los negros si se suman los diversos tipos de tumores, principalmente colorrectales (un 41 % más), de pulmón (un 35 % más) y de mama (un 19 % más).
Este trabajo se llevó a cabo en el marco de una pasantía del investigador en el Centro Internacional de Investigaciones sobre el Cáncer (Iarc, por sus siglas en inglés), en Francia, bajo la supervisión de Freddie Bray, jefe del Sector de Vigilancia del Cáncer de dicha institución. El referido período en el exterior formó parte del posdoctorado de Guimarães Ribeiro en el Instituto de Enseñanza e Investigación del Hospital de Amor (antiguamente conocido como Hospital do Câncer de Barretos) con beca de la FAPESP.
En un estudio anterior del mismo grupo, sin información referente a razas, se detectaron una elevada incidencia y mortalidad por cáncer de mama, colorrectal y de pulmón entre las personas más ricas de la capital paulista. Este dato puede estar correlacionado con las tasas de mortalidad relativamente altas de estos tipos de tumor entre blancos en comparación con los negros registradas en el estudio actual.
Estos trabajos integran el proyecto intitulado “Neoplasias malignas en las 18 ciudades pertenecientes a la regional de salud de Barretos, São Paulo: la importancia de un Registro de Cáncer de Base Poblacional”, apoyado por la FAPESP y coordinado por José Humberto Tavares Guerreiro Fregnani, investigador del Hospital de Amor, quien también firma los estudios.
Según los investigadores, uno de los objetivos de los mismos consiste en entender por qué existen estas desigualdades y poder señalar formas de asegurar el acceso al diagnóstico y al tratamiento para todos.
Resultados que se alinean
La ancestralidad puede tener una participación en la mayor incidencia de ciertos tipos de cáncer, lo que refuerza la necesidad de prestarle más atención a las poblaciones más vulnerables tanto por factores genéticos como socioeconómicos (lea más en portugués, en: agencia.fapesp.br/44760/).
Los resultados publicados ahora se alinean con otros estudios realizados en Brasil, como en el caso de un artículo firmado por investigadores de la Universidad de Campinas (Unicamp) apoyados por la FAPESP, que muestra la mayor mortalidad por cáncer de mama entre las mujeres brancas con relación a las mujeres negras en el estado de São Paulo. Pero con una salvedad: la mortalidad estaba disminuyendo entre las mujeres brancas y estaba aumentando entre las mujeres negras.
Otro estudio mostró una supervivencia más baja entre las mujeres negras y pardas al cáncer de mama, mientras que un trabajo reveló una tendencia al diagnóstico más tardío de este mismo tipo de tumores entre mujeres negras y pardas. Estos resultados se alinean con los de las mujeres negras en la zona de Barretos que ahora se han dado a conocer.
Un análisis de los determinantes del diagnóstico tardío del cáncer de cuello uterino mostró que las mujeres negras están sujetas a un riesgo un 20 % mayor de tener tumores detectados en estadios avanzados que en otros grupos étnicos.
Con relación al cáncer de próstata, un estudio de 2013 había demostrado un riesgo 300 % mayor de metástasis en el diagnóstico de los varones negros.
“Aún son escasos los estudios realizados en Brasil en este sentido, pero tenemos la información como para poder investigar. En Europa, a los datos personales que revelan el origen racial o étnico se los considera datos sensibles y no se encuentran disponibles. Lo que figura más en la literatura son los estudios basados en la población de Estados Unidos, cuyos resultados son coherentes con los que encontramos acá”, contextualiza Guimarães Ribeiro.
Los suscriptores pueden tener acceso al artículo intitulado Ethnic disparities in cancer mortality in the capital and northeast of the State of São Paulo, Brazil 2001–17 en el siguiente enlace: link.springer.com/article/10.1007/s10552-023-01812-w.
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