La FAPESP y Shell financiarán un Centro de Investigación en Nuevas Energías

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Agência FAPESP* –Por Elton Alisson  |  Agência FAPESP – La FAPESP y Shell realizaron el pasado de 16 de mayo, en el auditorio de la Fundación (en São Paulo, Brasil), un workshop para dar a conocer los temas de investigación contemplados en la convocatoria a la presentación de propuestas conjunta tendiente a la constitución de un Centro de Investigación de Nuevas Energías.
Dicho Centro será financiado por ambas instituciones. Se realizarán investigaciones que podrán viabilizar nuevas oportunidades de negocios, al explorar desafíos tecnológicos relacionados con el desarrollo de nuevos cargadores de energía de bajo costo –abundantes y limpias–, como así también nuevas rutas económicas y sostenibles con miras a convertir metano en productos químicos.

Con el fin de alcanzar estos objetivos, el Centro estará compuesto por cuatro divisiones de investigación: transportadores de alta densidad de energía, almacenamiento avanzado de energía, conversión de metano en productos y ciencia computacional de materiales.
Cada división de investigación podrá tener su sede en una universidad o un instituto de investigación distinto. Alternativamente, una institución anfitriona podrá albergar más de una división de investigación.
Una de las instituciones anfitrionas seleccionadas será designada por la FAPESP y por Shell para asumir el rol de institución hub. Aparte de operar su división de investigación, dicha institución hub será sede del comité ejecutivo encargado de dirigir el Centro, y coordinará las actividades de las cuatro divisiones de investigación.
El Centro podrá contar con financiación durante hasta 10 años en el marco del Programa de Centros de Investigación en Ingeniería de la FAPESP. Para los primeros cinco años de actividad está previsto un aporte de recursos por valor de 16,7 millones de reales compartidos por la FAPESP y Shell. La institución sede del proyecto seleccionado en el llamado a la presentación de propuestas participará con una contrapartida económica bajo la forma de sueldos de los investigadores y del personal de apoyo, la infraestructura y las instalaciones.
“En la FAPESP contamos con innumerables programas en todas las áreas, y algunos de ellos se encuentran más cerca de la frontera del conocimiento que otros. El Programa de Centros de Investigación en Ingeniería es uno de los que se orientan a la exploración de nuevas fronteras de la ciencia, en nuevas energías, por ejemplo. Éste es el caso de este nuevo Centro que se constituirá en asociación con Shell”, dijo José Goldemberg, presidente de la Fundación, durante la apertura del evento.
De acuerdo con el director científico de la FAPESP, Carlos Henrique de Brito Cruz, pocos países del mundo cuentan programas de esta índole, donde una agencia de fomento de la investigación se asocia con empresas, juntas emiten una convocatoria a la presentación de propuestas con objetivos comunes y financian los proyectos seleccionados durante un largo plazo.
La FAPESP apoya cinco Centros de Investigación en Ingeniería en alianza con las empresas Peugeot-Citroën, Shell/ BG Brasil, GlaxoSmithKline (GSK) y Natura, en las áreas de biocombustibles, gas natural, química verde, moléculas para fármacos y bienestar humano respectivamente. También suscribió recientemente una asociación con Statoil para la instalación de un Centro de Investigación en el área de depósitos de petróleo y gas.
“El Programa de Centros de Investigación en Ingeniería de la FAPESP permite la integración de investigadores de empresas con científicos ligados a universidades e instituciones de investigación del estado de São Paulo, de manera tal de desarrollar una efectiva colaboración en investigación científica”, dijo Brito Cruz.
“La colaboración con Shell constituye una oportunidad especial para que los investigadores del estado de São Paulo lleven adelante estudios en colaboración con científicos de la empresa, que realizan una intensa actividad interna de I&D”, añadió.
Transición energética
André Lopes Araújo, presidente de Shell de Brasil, destacó que la asociación con la FAPESP constituye una oportunidad para incrementar la interacción de la empresa con la comunidad científica del estado de São Paulo y para ampliar sus esfuerzos de investigación en nuevas energías.
La empresa anglo-holandesa, que mantiene colaboraciones con universidades e instituciones de investigación científica de Estados Unidos, el Reino Unido, Holanda, la India y China, decidió aumentar sus inversiones en esta área en los últimos años, con el objetivo de afrontar el desafío de la transición energética, comentó Lopes Araújo.
“Las proyecciones indican que en 2050 la población mundial ascenderá a 9.000 millones de personas. Afrontaremos el reto de producir más energía para atender la demanda y, al mismo tiempo, disminuir las emisiones de gases contaminantes, tales como el CO2. Entendemos que las soluciones tendientes a hacer frente al desafío de la transición energética provendrán de las inversiones en tecnología e innovación”, afirmó.
Shell creó en 2016 una división de energías renovables y ha concretado una serie de inversiones en biocombustibles de primera y de segunda generación –hidrógeno y energía solar y eólica– en distintas partes del mundo.

“Pese a que esas fuentes alternativas de energía tienen un potencial comercial significativo, aún no están listas como para sostener el futuro del sistema energético”, dijo Ajay Mehta, gerente general de Investigación de Largo Alcance (LRR, por sus siglas en inglés) de Shell.
Algunas de las áreas que podrán hacer aportes al surgimiento de nuevas fuentes de energía, según el gerente, son las de electroquímica, ciencia de materiales, catalizadores estructurados y fenómenos de interfaces, fenómenos de transporte, ciencia computacional, química de materiales y biociencias.
“Haremos hincapié en áreas en las cuales pretendemos construir capacidades: existen posibilidades de innovación ilimitada que tienen impacto en diversas aplicaciones”, dijo Mehta.
En el área de transportadores de alta densidad de energía, la idea es apoyar a través del Centro investigaciones relacionadas con el desarrollo de rutas eficientes en términos de costos para sintetizar moléculas tales como hidrógeno, metanol, hidrocarburos y amoníaco partiendo de agua, nitrógeno y dióxido de carbono, por ejemplo.
La división de almacenamiento avanzado de energía financiará investigaciones de baterías con electrodos basados en intercalación y conversión, electrolitos de distintos tipos y otros dispositivos de almacenamiento, lo que incluye baterías de flujo y supercondensadores.
A su vez, la división de conversión de metano en productos estimulará la búsqueda de posibles nuevas vías de conversión de este gas en productos químicos de alto valor comercial, tales como metanol, acetileno y etileno.
Y la división de ciencia computacional de materiales apunta a avanzar en la investigación de fuentes de energía renovables y neutras en carbono, con base en la explotación de herramientas, nuevos métodos y técnicas computacionales.
El plazo para la presentación de propuestas ante el Centro de Investigación en Nuevas Energías culmina el 9 de junio de 2017. Y los resultados se conocerán el 1º de septiembre.
También participaron en la apertura del evento Carlos Américo Pacheco, director presidente del Consejo Técnico Administrativo de la FAPESP, y Jane Zheng, gerente general de I&D de Shell en Brasil.
Participaron en las conferencias y en los debates científicos Luiz Nunes de Oliveira, coordinador del área de Programas Especiales y Colaboraciones en Investigación de la FAPESP; Joep Huijsmans, asesor técnico sénior; Leonardo Spanu, investigador sénior, y Flávia Cassiola, investigadora brasileña de Shell Internacional, Producción y Exploración.
La convocatoria se encuentra publicada en: fapesp.br/10896.

<p><b>Por Elton Alisson  |  Agência FAPESP</b> – La FAPESP y Shell realizaron el pasado de 16 de mayo, en el auditorio de la Fundación (en São Paulo, Brasil), un <i>workshop </i>para dar a conocer los temas de investigación contemplados en la <b><a href="http://www.fapesp.br/en/10896" target="_blank">convocatoria a la presentación de propuestas</a></b> conjunta tendiente a la constitución de un Centro de Investigación de Nuevas Energías.<o:p></o:p></p>
<p>Dicho Centro será financiado por ambas instituciones. Se realizarán investigaciones que podrán viabilizar nuevas oportunidades de negocios, al explorar desafíos tecnológicos relacionados con el desarrollo de nuevos cargadores de energía de bajo costo –abundantes y limpias–, como así también nuevas rutas económicas y sostenibles con miras a convertir metano en productos químicos.</p>
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<p>Con el fin de alcanzar estos objetivos, el Centro estará compuesto por cuatro divisiones de investigación: transportadores de alta densidad de energía, almacenamiento avanzado de energía, conversión de metano en productos y ciencia computacional de materiales.<o:p></o:p></p>
<p>Cada división de investigación podrá tener su sede en una universidad o un instituto de investigación distinto. Alternativamente, una institución anfitriona podrá albergar más de una división de investigación.<o:p></o:p></p>
<p>Una de las instituciones anfitrionas seleccionadas será designada por la FAPESP y por Shell para asumir el rol de institución <i>hub</i>. Aparte de operar su división de investigación, dicha institución <i>hub</i> será sede del comité ejecutivo encargado de dirigir el Centro, y coordinará las actividades de las cuatro divisiones de investigación.<o:p></o:p></p>
<p>El Centro podrá contar con financiación durante hasta 10 años en el marco del Programa de Centros de Investigación en Ingeniería de la FAPESP. Para los primeros cinco años de actividad está previsto un aporte de recursos por valor de 16,7 millones de reales compartidos por la FAPESP y Shell. La institución sede del proyecto seleccionado en el llamado a la presentación de propuestas participará con una contrapartida económica bajo la forma de sueldos de los investigadores y del personal de apoyo, la infraestructura y las instalaciones.<o:p></o:p></p>
<p>“En la FAPESP contamos con innumerables programas en todas las áreas, y algunos de ellos se encuentran más cerca de la frontera del conocimiento que otros. El Programa de Centros de Investigación en Ingeniería es uno de los que se orientan a la exploración de nuevas fronteras de la ciencia, en nuevas energías, por ejemplo. Éste es el caso de este nuevo Centro que se constituirá en asociación con Shell”, dijo José Goldemberg, presidente de la Fundación, durante la apertura del evento.<o:p></o:p></p>
<p>De acuerdo con el director científico de la FAPESP, Carlos Henrique de Brito Cruz, pocos países del mundo cuentan programas de esta índole, donde una agencia de fomento de la investigación se asocia con empresas, juntas emiten una convocatoria a la presentación de propuestas con objetivos comunes y financian los proyectos seleccionados durante un largo plazo.<o:p></o:p></p>
<p>La FAPESP apoya cinco Centros de Investigación en Ingeniería en alianza con las empresas Peugeot-Citroën, Shell/ BG Brasil, GlaxoSmithKline (GSK) y Natura, en las áreas de biocombustibles, gas natural, química verde, moléculas para fármacos y bienestar humano respectivamente. También suscribió recientemente una asociación con Statoil para la instalación de un Centro de Investigación en el área de depósitos de petróleo y gas.<o:p></o:p></p>
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<p>“La colaboración con Shell constituye una oportunidad especial para que los investigadores del estado de São Paulo lleven adelante estudios en colaboración con científicos de la empresa, que realizan una intensa actividad interna de I&D”, añadió.<o:p></o:p></p>
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<p>André Lopes Araújo, presidente de Shell de Brasil, destacó que la asociación con la FAPESP constituye una oportunidad para incrementar la interacción de la empresa con la comunidad científica del estado de São Paulo y para ampliar sus esfuerzos de investigación en nuevas energías.<o:p></o:p></p>
<p>La empresa anglo-holandesa, que mantiene colaboraciones con universidades e instituciones de investigación científica de Estados Unidos, el Reino Unido, Holanda, la India y China, decidió aumentar sus inversiones en esta área en los últimos años, con el objetivo de afrontar el desafío de la transición energética, comentó Lopes Araújo.<o:p></o:p></p>
<p>“Las proyecciones indican que en 2050 la población mundial ascenderá a 9.000 millones de personas. Afrontaremos el reto de producir más energía para atender la demanda y, al mismo tiempo, disminuir las emisiones de gases contaminantes, tales como el CO<sub>2</sub>. Entendemos que las soluciones tendientes a hacer frente al desafío de la transición energética provendrán de las inversiones en tecnología e innovación”, afirmó.<o:p></o:p></p>
<p>Shell creó en 2016 una división de energías renovables y ha concretado una serie de inversiones en biocombustibles de primera y de segunda generación –hidrógeno y energía solar y eólica– en distintas partes del mundo.</p>
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<p>Algunas de las áreas que podrán hacer aportes al surgimiento de nuevas fuentes de energía, según el gerente, son las de electroquímica, ciencia de materiales, catalizadores estructurados y fenómenos de interfaces, fenómenos de transporte, ciencia computacional, química de materiales y biociencias.<o:p></o:p></p>
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<p>En el área de transportadores de alta densidad de energía, la idea es apoyar a través del Centro investigaciones relacionadas con el desarrollo de rutas eficientes en términos de costos para sintetizar moléculas tales como hidrógeno, metanol, hidrocarburos y amoníaco partiendo de agua, nitrógeno y dióxido de carbono, por ejemplo.<o:p></o:p></p>
<p>La división de almacenamiento avanzado de energía financiará investigaciones de baterías con electrodos basados en intercalación y conversión, electrolitos de distintos tipos y otros dispositivos de almacenamiento, lo que incluye baterías de flujo y supercondensadores.<o:p></o:p></p>
<p>A su vez, la división de conversión de metano en productos estimulará la búsqueda de posibles nuevas vías de conversión de este gas en productos químicos de alto valor comercial, tales como metanol, acetileno y etileno.<o:p></o:p></p>
<p>Y la división de ciencia computacional de materiales apunta a avanzar en la investigación de fuentes de energía renovables y neutras en carbono, con base en la explotación de herramientas, nuevos métodos y técnicas computacionales.<o:p></o:p></p>
<p>El plazo para la presentación de propuestas ante el Centro de Investigación en Nuevas Energías culmina el 9 de junio de 2017. Y los resultados se conocerán el 1º de septiembre.<o:p></o:p></p>
<p>También participaron en la apertura del evento Carlos Américo Pacheco, director presidente del Consejo Técnico Administrativo de la FAPESP, y Jane Zheng, gerente general de I&D de Shell en Brasil.<o:p></o:p></p>
<p>Participaron en las conferencias y en los debates científicos Luiz Nunes de Oliveira, coordinador del área de Programas Especiales y Colaboraciones en Investigación de la FAPESP; Joep Huijsmans, asesor técnico sénior; Leonardo Spanu, investigador sénior, y Flávia Cassiola, investigadora brasileña de Shell Internacional, Producción y Exploración.<o:p></o:p></p>
<p>La convocatoria se encuentra publicada en: <b><a href="http://fapesp.br/10896" target="_blank">fapesp.br/10896</a></b>.</p>
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