"La investigación científica básica es una condición para el desarrollo"

Helena Nader, presidenta de la Sociedad Brasileña para el Progreso de la Ciencia, cuestiona la exclusión de una palabra clave en un proyecto de enmienda constitucional

Por José Tadeu Arantes

Agência FAPESP – La investigación científica básica, aquélla que genera conocimientos que no tienen necesariamente una aplicación inmediata, resulta a menudo entendida como una actividad ociosa y onerosa. Se escamotea así que el conocimiento básico actual constituirá el conocimiento aplicado del mañana. Y que ningún desarrollo científico y tecnológico habría sido posible sin el recurso de la más básica de las disciplinas: la matemática.

La biomédica Helena Bonciani Nader publicó un artículo sobre este tema en la edición del 24 de marzo en el diario Correio Braziliense. Nader, que es docente titular de la Universidad Federal de São Paulo (Unifesp) y presidenta de la Sociedad Brasileña para el Progreso de la Ciencia (SBPC), se refirió al asunto en diálogo con Agência FAPESP.

Agência FAPESP – ¿Qué la motivó a escribir el artículo?
Helena Bonciani Nader – La Constitución Brasileña de 1988 fue fruto de un trabajo sumamente interesante, en el cual participaron amplios sectores de la sociedad. La SBPC fue extremadamente activa en ese proceso. Y el texto constitucional le dedicó un capítulo entero a la ciencia y la tecnología. El primer inciso del artículo 218 determina que “la investigación científica básica recibirá tratamiento prioritario del Estado teniendo en cuenta el bien público y el progreso de las ciencias”. Pues bien, ahora tenemos en la pauta de votación de la Cámara de Diputados una propuesta de enmienda constitucional muy positiva, la PEC nº 290/ 13, cuya autora es la diputada Margarida Salomão (del Partido de los Trabajadores de Minas Gerais), que altera dispositivos con el objetivo de mejorar la articulación entre el Estado y las instituciones de investigación científica. Su objetivo consistió en estimular el desarrollo científico y tecnológico y la innovación, cosa que cuenta con nuestra total simpatía y apoyo. No obstante, en las idas y vueltas por las comisiones parlamentarias, quedó excluida de la PEC nº 290/ 13 la palabra “básica”. De este modo, la propuesta de redacción del inciso 1º del artículo 218 de la Constitución quedó de la siguiente manera: “La investigación científica y tecnológica recibirá tratamiento prioritario del Estado”. Es decir, se incorporó la palabra “tecnológica’ y se sustrajo la palabra “básica”.

Agência FAPESP – Parece un detalle irrelevante, pero a la hora de estipular las partidas presupuestarias ese detalle marcará una diferencia importante, ¿no es cierto?
Nader – Exactamente. Por eso hemos luchado tanto por corregir esa redacción. Usted no se imagina cuánto nos hemos movido en ese sentido. Cuando digo esto, no lo digo en mi nombre. Como presidenta de la SBPC, hablo en nombre de más de un centenar de sociedades científicas afiliadas. La investigación básica es subestimada actualmente. Se habla únicamente de la innovación. La innovación no es un paquete que se compra. O hasta puede comprárselo. Pero en tal caso, Brasil seguirá pagando regalías. ¿Eso es lo que se anhela?

Agência FAPESP – ¿Es un énfasis que recae unilateralmente, que valora el final del proceso y omite el comienzo?
Nader – Eso mismo. De no haber investigación básica, altamente financiada, en las universidades e institutos, en las áreas de agricultura y ganadería, Brasil no sería en la actualidad la séptima economía del mundo. Fue la investigación lo que generó la tecnología que generó la innovación. No habría sido así si nos hubiésemos limitado a copiar modelos creados en países del hemisferio Norte. Aquí la realidad es otra, el clima es otro, el suelo es otro. Cuando hicimos la investigación aquí, nos capacitamos para responder con respecto a todas esas condiciones diferenciadas. Vea el caso de Embrapa [la estatal Empresa Brasileña de Investigación Agropecuaria]. Tengo mucho orgullo de Embrapa. Pero también tengo orgullo de las escuelas de Agronomía dispersas por todo este país que brindaron el soporte necesario como para que pudiese existir una Embrapa. No fue un paquete tecnológico que Brasil compró. Fue una inversión a largo plazo en investigación básica.

Agência FAPESP – Y el gran desafío actual consiste en ampliar el contingente de científicos de alto nivel en Brasil, de manera tal de dar respuesta a las demandas del desarrollo.
Nader – Coincido totalmente. ¿Por qué cree que China aumentó un 50% su inversión en investigación científica básica? ¿Por qué Estados Unidos sigue invirtiendo en investigación básica? ¿Por qué Europa sigue invirtiendo? Algunos sostienen erróneamente que la SBPC no valora la tecnología y la innovación. Eso es falso. Nuestra línea es clara: sin educación no hay investigación científica; sin investigación científica no hay desarrollo tecnológico; sin desarrollo tecnológico no hay innovación. Son eslabones consecutivos de una misma cadena. Uno depende del otro. De nada sirve invertir solamente en una parte de la cadena. Es necesario invertir en todas.

Agência FAPESP – Esto queda claro en el ejemplo que usted mencionó con relación a Embrapa.
Nader – Le voy a dar otro ejemplo de éxito: Embraer. La empresa no empezó con la fabricación de aviones. Empezó con la creación del ITA [el Instituto Tecnológico de Aeronáutica], fomentando la educación, que posteriormente generó ciencia, que luego generó tecnología. Muchos sostienen erróneamente que las universidades brasileñas sólo hacen investigación que no sirve para nada. No estoy de acuerdo. Gracias a esos trabajos tratamos el cáncer en Brasil y no en el exterior. Gracias a esos trabajos, nuestro parque de vehículos es en gran medida impulsado con etanol, un combustible de origen renovable y mucho menos contaminante que los derivados de petróleo. Gracias a esos trabajos, tal como ya lo he dicho, somos actualmente la séptima economía del mundo. La investigación científica básica es la condición para el desarrollo. Es un eslabón fundamental de una cadena que comienza con la formación del individuo y beneficia a toda la sociedad.