$ PPP 642,5 millones para apoyar la investigación hecha en Brasil

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Agência FAPESP* –Por Fabrício Marques  |  Revista Pesquisa FAPESP – La FAPESP invirtió 642,5 millones en $ purchasing power parity (paridad de poder adquisitivo o PPP, por sus siglas en inglés) para apoyar la investigación científica y tecnológica hecha en el estado de São Paulo, en Brasil, durante el año 2015.
Los ingresos de la Fundación fueron de $ PPP 729,7 millones en 2015. De dicho total, el 77,4%, es decir, $ PPP 565,1 millones, correspondieron a giros del Tesoro del Estado, una transferencia equivalente al 1% de la recaudación de impuestos del estado de São Paulo. Otro 5,5% ($ PPP 39,9 millones) provino de recursos patrimoniales de la Fundación, y un 17,1% ($ PPP 124,7 millones) se refiere a otras fuentes de recursos, tales como convenios con instituciones para el financiamiento conjunto de investigaciones en las cuales la FAPESP administra el desembolso. Estos datos forman parte del Relatório de Atividades 2015, que se encuentra disponible en: fapesp.br/publicacoes.
Una novedad del Relatório de Atividades 2015 aparece en el capítulo que dimensiona el sistema paulista de ciencia y tecnología, compuesto por 62 entidades con su misión orientada a actividades de investigación, entre universidades, instituciones aisladas de educación superior, institutos de investigación públicos y privados, y por 14.787 empresas que desarrollan actividades de innovación.
El estado disponía de 74 mil investigadores y respondió por la publicación de 21.783 trabajos científicos en 2015. Se invirtió un total de $ PPP 14.800 millones en investigación y desarrollo en el estado durante el año. Las empresas fueron responsables del 57,2% de ese monto, en tanto que el 22,7% provino de la gobernación del estado, un 17,7% del gobierno federal y un 2,4% de instituciones de educación superior particulares. Del total de recursos que invirtió la FAPESP, el 52% se destinó a Investigaciones con Orientadas a Aplicaciones, un 40% a Investigaciones para el Avance del Conocimiento y un 8% al Apoyo a la Infraestructura de Investigación Científica Paulista.
La Fundación financia en diversas categorías la investigación aplicada, tales como las que estimulan la innovación en pequeñas empresas y la asociación entre empresas y universidades para el desarrollo conjunto de conocimiento y de nuevas tecnologías, como así también los estudios que contribuyen con la formulación de políticas públicas. También se encuadran en esta lista programas de investigación orientados hacia temas específicos, tales como bioenergía, cambios climáticos globales, biodiversidad y ciencia aplicada con base en grandes bancos de datos, entre otros.
Un destacado de 2015 fue la creación de tres nuevos Centros de Investigación Aplicada Colaborativa, que comprenden grandes asociaciones entre empresas y universidades o institutos, todas con un contrato por hasta diez años para desarrollar actividades de investigación avanzada. Cada real invertido por la FAPESP moviliza un real de una empresa y dos reales de una universidad o un instituto de investigación.
La multinacional farmacéutica GlaxoSmithKline (GSK) es socia en dos de estos nuevos centros. Se efectuarán inversiones del orden de $ PPP 47,6 millones, de los cuales la FAPESP y GSK desembolsarán $ PPP 18,7 millones. Otros $ PPP 28,9 millones correrán por cuenta de las instituciones que serán sedes de los centros. “Nuestros objetivo es, en el futuro, lanzar un producto orgullosamente descubierto en Brasil”, dijo Cesar Rengifo, presidente de GSK.
Química sostenible 
Uno de los centros, el de química sostenible, con sede en la Universidad Federal de São Carlos (UFSCar), apunta a descubrir insumos farmacéuticos y a desarrollar su producción sostenible. Otra meta consiste en encontrar solventes, reactivos y materias primas sostenibles, ya que más de un tercio de las emisiones de carbono de la cadena de suministros de GSK es atribuido a esos materiales.
El segundo centro, orientado hacia la detección de blancos moleculares que permitan el desarrollo de fármacos destinados a enfermedades inflamatorias, tiene al Instituto Butantan como institución sede.
En tanto, el tercer centro, de investigación e innovación en gas natural, es una colaboración entre BG Group-Shell, la Escuela Politécnica (Poli) y el Instituto de Energía y Ambiente (IEE), ambos de la Universidad de São Paulo (USP), aparte del Instituto de Investigaciones Energéticas y Nucleares (Ipen). Este centro fue concebido para desarrollar investigaciones sobre usos y aplicaciones del gas natural. La meta es intensificar su presencia en la matriz energética paulista y en la brasileña, y contribuir para con la disminución de las emisiones de gases de efecto invernadero.
“Nuestras líneas de investigación se orientarán al transporte y al uso del gas, además de la prospección de nuevos insumos basados en éste”, comenta Julio Meneghini, docente de la Poli-USP y coordinador del centro. El modelo de estos centros, con financiación a largo plazo y abordaje de temas de frontera, se ha adoptado en iniciativas con otras empresas, tales como la automovilística Peugeot Citröen y la empresa de cosméticos Natura.
Competitividad
La FAPESP creó y mantiene un conjunto de programas que apuntan a apoyar investigaciones con carácter más audaz y competitivo a nivel internacional, tales como los Centros de Investigación, Innovación y Difusión (CEPID), los Proyectos Temáticos, el Programa Jóvenes Investigadores en Centros Emergentes (JP), el São Paulo Excellence Chairs (SPEC) y los Centros de Investigación Aplicada Colaborativa. El desembolso en 2015 con ese conjunto fue de $ PPP 211,5 millones.
Están también los SPEC, financiaciones destinadas a atraer a científicos de alto nivel de otros países para encabezar proyectos en instituciones del estado. En 2015, ocho proyectos recibieron un total de $ PPP 3,4 millones.
Los 17 CEPID recibieron $ PPP 35,7 millones. El objetivo de estos centros, financiados por hasta 11 años, consiste en producir investigación de nivel internacional y de carácter multidisciplinario en la frontera del conocimiento.
En tanto, los 326 investigadores beneficiados por el programa JP recibieron $ PPP 36,4 millones. Ese programa apunta a atraer y a radicar en el estado de São Paulo a jóvenes doctores con gran potencial, estimulando la creación de laboratorios y núcleos de investigación en centros que aún no tienen un historial de investigación científica o la implementación de nuevas líneas de estudio en instituciones consolidadas. Salud, biología, física e ingeniería fueron las principales áreas de investigación enfocadas. El programa también apunta a atraer a jóvenes científicos extranjeros con inserción internacional y que actúan en temas de frontera aún no cubiertos por investigadores del estado. Nueve proyectos vigentes en 2015 son de investigadores extranjeros.
Algunas áreas del conocimiento que cuentan con una comunidad de investigadores más densa y numerosa, tradicionalmente tienen una cantidad mayor de proyectos, tal como en los casos de salud, que se alzó con el 27,9% del total desembolsado, biología, con un 14,9%, ciencias humanas y sociales, con un 10,3%, ingeniería, con un 8,6%, agronomía y veterinaria, con un 7,8%, química, con un 5%, física, con un 4,9%, y astronomía, con el 3,1%, entre otras.
En 2015, por primera vez, las investigaciones interdisciplinarias se quedaron con el tercer desembolso en lo que hace al monto, con un 10,4% de las erogaciones totales.
La demanda espontánea
Poco más del 40% del desembolso de la FAPESP en 2015, el equivalente a $ PPP 258,2 millones, se destinó a becas regulares en el país y en el exterior, una de las líneas de fomento a través de las cuales la Fundación atiende la demanda espontánea de estudiantes e investigadores.
Aunque representen tan sólo un 21,9% del desembolso con becas regulares, los recursos destinados a las modalidades en el exterior experimentaron un aumento nominal del 32,9% con relación a 2014, compensando los resultados de las becas regulares en el país, que percibieron un 7,6% menos.
Una parte significativa de los recursos se orientó a las Becas de Pasantía de Investigación en el Exterior (BEPE, por sus siglas en portugués), destinadas a becarios de la FAPESP, desde la iniciación a la investigación científica hasta el posdoctorado, interesados en realizar en otro país pasantías de investigación de hasta un año de duración. El monto en 2015 en este caso fue de $ PPP 43,8 millones.
El informe registra también un avance en el apoyo a iniciativas de colaboración internacional. Fueron 355 ayudas a investigaciones y 1.185 becas en diversos programas de estímulo a la cooperación internacional. En total se invirtieron $ PPP 75,1 millones, de los cuales $ PPP 31,9 millones fueron en cofinanciamiento de investigaciones resultantes de convenios con universidades y agencias de fomento de la investigación del exterior –la FAPESP mantenía el año pasado 142 acuerdos de cooperación vigentes con instituciones de 27 países, de los cuales 26 se firmaron en 2015– y $ PPP 43,2 millones en proyectos de intercambio científico no vinculados a dichos convenios.

<p><strong>Por Fabrício Marques  |  Revista Pesquisa FAPESP</strong> – La FAPESP invirtió 642,5 millones en $ <i>purchasing power parity</i> (paridad de poder adquisitivo o PPP, por sus siglas en inglés) para apoyar la investigación científica y tecnológica hecha en el estado de São Paulo, en Brasil, durante el año 2015.</p>
<p>Los ingresos de la Fundación fueron de $ PPP 729,7 millones en 2015. De dicho total, el 77,4%, es decir, $ PPP 565,1 millones, correspondieron a giros del Tesoro del Estado, una transferencia equivalente al 1% de la recaudación de impuestos del estado de São Paulo. Otro 5,5% ($ PPP 39,9 millones) provino de recursos patrimoniales de la Fundación, y un 17,1% ($ PPP 124,7 millones) se refiere a otras fuentes de recursos, tales como convenios con instituciones para el financiamiento conjunto de investigaciones en las cuales la FAPESP administra el desembolso. Estos datos forman parte del <em>Relatório de Atividades 2015</em>, que se encuentra disponible en: <a href="http://www.fapesp.br/publicacoes" target="_blank"><strong>fapesp.br/publicacoes</strong></a>.</p>
<p>Una novedad del <em>Relatório de Atividades 2015</em> aparece en el capítulo que dimensiona el sistema paulista de ciencia y tecnología, compuesto por 62 entidades con su misión orientada a actividades de investigación, entre universidades, instituciones aisladas de educación superior, institutos de investigación públicos y privados, y por 14.787 empresas que desarrollan actividades de innovación.</p>
<p>El estado disponía de 74 mil investigadores y respondió por la publicación de 21.783 trabajos científicos en 2015. Se invirtió un total de $ PPP 14.800 millones en investigación y desarrollo en el estado durante el año. Las empresas fueron responsables del 57,2% de ese monto, en tanto que el 22,7% provino de la gobernación del estado, un 17,7% del gobierno federal y un 2,4% de instituciones de educación superior particulares. Del total de recursos que invirtió la FAPESP, el 52% se destinó a Investigaciones con Orientadas a Aplicaciones, un 40% a Investigaciones para el Avance del Conocimiento y un 8% al Apoyo a la Infraestructura de Investigación Científica Paulista.</p>
<p>La Fundación financia en diversas categorías la investigación aplicada, tales como las que estimulan la innovación en pequeñas empresas y la asociación entre empresas y universidades para el desarrollo conjunto de conocimiento y de nuevas tecnologías, como así también los estudios que contribuyen con la formulación de políticas públicas. También se encuadran en esta lista programas de investigación orientados hacia temas específicos, tales como bioenergía, cambios climáticos globales, biodiversidad y ciencia aplicada con base en grandes bancos de datos, entre otros.</p>
<p>Un destacado de 2015 fue la creación de tres nuevos Centros de Investigación Aplicada Colaborativa, que comprenden grandes asociaciones entre empresas y universidades o institutos, todas con un contrato por hasta diez años para desarrollar actividades de investigación avanzada. Cada real invertido por la FAPESP moviliza un real de una empresa y dos reales de una universidad o un instituto de investigación.</p>
<p>La multinacional farmacéutica GlaxoSmithKline (GSK) es socia en dos de estos nuevos centros. Se efectuarán inversiones del orden de $ PPP 47,6 millones, de los cuales la FAPESP y GSK desembolsarán $ PPP 18,7 millones. Otros $ PPP 28,9 millones correrán por cuenta de las instituciones que serán sedes de los centros. “Nuestros objetivo es, en el futuro, lanzar un producto orgullosamente descubierto en Brasil”, dijo Cesar Rengifo, presidente de GSK.</p>
<p><strong>Química sostenible </strong></p>
<p>Uno de los centros, el de química sostenible, con sede en la Universidad Federal de São Carlos (UFSCar), apunta a descubrir insumos farmacéuticos y a desarrollar su producción sostenible. Otra meta consiste en encontrar solventes, reactivos y materias primas sostenibles, ya que más de un tercio de las emisiones de carbono de la cadena de suministros de GSK es atribuido a esos materiales.</p>
<p>El segundo centro, orientado hacia la detección de blancos moleculares que permitan el desarrollo de fármacos destinados a enfermedades inflamatorias, tiene al Instituto Butantan como institución sede.</p>
<p>En tanto, el tercer centro, de investigación e innovación en gas natural, es una colaboración entre BG Group-Shell, la Escuela Politécnica (Poli) y el Instituto de Energía y Ambiente (IEE), ambos de la Universidad de São Paulo (USP), aparte del Instituto de Investigaciones Energéticas y Nucleares (Ipen). Este centro fue concebido para desarrollar investigaciones sobre usos y aplicaciones del gas natural. La meta es intensificar su presencia en la matriz energética paulista y en la brasileña, y contribuir para con la disminución de las emisiones de gases de efecto invernadero.</p>
<p>“Nuestras líneas de investigación se orientarán al transporte y al uso del gas, además de la prospección de nuevos insumos basados en éste”, comenta Julio Meneghini, docente de la Poli-USP y coordinador del centro. El modelo de estos centros, con financiación a largo plazo y abordaje de temas de frontera, se ha adoptado en iniciativas con otras empresas, tales como la automovilística Peugeot Citröen y la empresa de cosméticos Natura.</p>
<p><strong>Competitividad</strong></p>
<p>La FAPESP creó y mantiene un conjunto de programas que apuntan a apoyar investigaciones con carácter más audaz y competitivo a nivel internacional, tales como los Centros de Investigación, Innovación y Difusión (CEPID), los Proyectos Temáticos, el Programa Jóvenes Investigadores en Centros Emergentes (JP), el São Paulo Excellence Chairs (SPEC) y los Centros de Investigación Aplicada Colaborativa. El desembolso en 2015 con ese conjunto fue de $ PPP 211,5 millones.</p>
<p>Están también los SPEC, financiaciones destinadas a atraer a científicos de alto nivel de otros países para encabezar proyectos en instituciones del estado. En 2015, ocho proyectos recibieron un total de $ PPP 3,4 millones.</p>
<p>Los 17 CEPID recibieron $ PPP 35,7 millones. El objetivo de estos centros, financiados por hasta 11 años, consiste en producir investigación de nivel internacional y de carácter multidisciplinario en la frontera del conocimiento.</p>
<p>En tanto, los 326 investigadores beneficiados por el programa JP recibieron $ PPP 36,4 millones. Ese programa apunta a atraer y a radicar en el estado de São Paulo a jóvenes doctores con gran potencial, estimulando la creación de laboratorios y núcleos de investigación en centros que aún no tienen un historial de investigación científica o la implementación de nuevas líneas de estudio en instituciones consolidadas. Salud, biología, física e ingeniería fueron las principales áreas de investigación enfocadas. El programa también apunta a atraer a jóvenes científicos extranjeros con inserción internacional y que actúan en temas de frontera aún no cubiertos por investigadores del estado. Nueve proyectos vigentes en 2015 son de investigadores extranjeros.</p>
<p>Algunas áreas del conocimiento que cuentan con una comunidad de investigadores más densa y numerosa, tradicionalmente tienen una cantidad mayor de proyectos, tal como en los casos de salud, que se alzó con el 27,9% del total desembolsado, biología, con un 14,9%, ciencias humanas y sociales, con un 10,3%, ingeniería, con un 8,6%, agronomía y veterinaria, con un 7,8%, química, con un 5%, física, con un 4,9%, y astronomía, con el 3,1%, entre otras.</p>
<p>En 2015, por primera vez, las investigaciones interdisciplinarias se quedaron con el tercer desembolso en lo que hace al monto, con un 10,4% de las erogaciones totales.</p>
<p><strong>La demanda espontánea</strong></p>
<p>Poco más del 40% del desembolso de la FAPESP en 2015, el equivalente a $ PPP 258,2 millones, se destinó a becas regulares en el país y en el exterior, una de las líneas de fomento a través de las cuales la Fundación atiende la demanda espontánea de estudiantes e investigadores.</p>
<p>Aunque representen tan sólo un 21,9% del desembolso con becas regulares, los recursos destinados a las modalidades en el exterior experimentaron un aumento nominal del 32,9% con relación a 2014, compensando los resultados de las becas regulares en el país, que percibieron un 7,6% menos.</p>
<p>Una parte significativa de los recursos se orientó a las Becas de Pasantía de Investigación en el Exterior (BEPE, por sus siglas en portugués), destinadas a becarios de la FAPESP, desde la iniciación a la investigación científica hasta el posdoctorado, interesados en realizar en otro país pasantías de investigación de hasta un año de duración. El monto en 2015 en este caso fue de $ PPP 43,8 millones.</p>
<p>El informe registra también un avance en el apoyo a iniciativas de colaboración internacional. Fueron 355 ayudas a investigaciones y 1.185 becas en diversos programas de estímulo a la cooperación internacional. En total se invirtieron $ PPP 75,1 millones, de los cuales $ PPP 31,9 millones fueron en cofinanciamiento de investigaciones resultantes de convenios con universidades y agencias de fomento de la investigación del exterior –la FAPESP mantenía el año pasado 142 acuerdos de cooperación vigentes con instituciones de 27 países, de los cuales 26 se firmaron en 2015– y $ PPP 43,2 millones en proyectos de intercambio científico no vinculados a dichos convenios.</p>
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