Es una tecnología desarrollada por una startup brasileña con el apoyo de la FAPESP y se la está probando en la compañía Klabin de papel y celulosa (foto: Radaz/Difusión)
Es una tecnología desarrollada por una startup brasileña con el apoyo de la FAPESP y se la está probando en la compañía Klabin de papel y celulosa
Es una tecnología desarrollada por una startup brasileña con el apoyo de la FAPESP y se la está probando en la compañía Klabin de papel y celulosa
Es una tecnología desarrollada por una startup brasileña con el apoyo de la FAPESP y se la está probando en la compañía Klabin de papel y celulosa (foto: Radaz/Difusión)
FAPESP Investigación para la Innovación* – La industria brasileña de papel y celulosa Klabin se encuentra abocada a la concreción de la etapa final de evaluación de un proyecto piloto cuyo objetivo es poner a prueba el monitoreo de hormigueros mediante el empleo de radares embarcados en drones.
Esta iniciativa apunta fundamentalmente a detectar nidos de hormigas cortadoras, uno de los principales grupos de insectos plagas de los bosques plantados, durante las etapas de anteriores y posteriores al cultivo. De esta forma, será posible ampliar el monitoreo e incrementar la eficiencia del control de esta plaga, favoreciendo así el desarrollo potencial de los árboles.
Esta acción es el resultado del trabajo conjunto de la empresa con la startup Radaz, especializada en el desarrollo de radares de teledetección y que contó con el apoyo del Programa FAPESP Investigación Innovadora en Pequeñas Empresas (PIPE), y con Gian Carlos Oré Huacles, investigador de la Unicamp (Universidad de Campinas, estado de São Paulo, Brasil), en donde cursa su doctorado en ingeniería eléctrica bajo la dirección de tesis del profesor Hugo Figueroa.
El proyecto, que se puso en marcha en su etapa de investigación hace dos años y evolucionó hacia la prueba piloto en campo en 2022, se basa en un radar embarcado en un dron no tripulado que sobrevuela las plantaciones tomando imágenes del subsuelo, a los efectos de detectar los hormigueros. Esta tecnología, desarrollada en el marco de un proyecto apoyado por la FAPESP, se puso a prueba inicialmente en el monitoreo del crecimiento de la caña de azúcar (lea más en: https://agencia.fapesp.br/36132).
El gerente de investigación y desarrollo forestal de Kabin, Bruno Afonso Magro, explica que el seguimiento de las hormigas cortadoras constituye una actividad constante en los bosques plantados, especialmente a causa del alto potencial perjudicial de estos insectos, que pueden menguar más de un 15 % del cultivo de no controlárselos.
“Como regla, el monitoreo de hormigueros se concreta por muestreo del área y mediante la acción humana. La operación de esta actividad constituye un hito tecnológico cuyas principales diferencias residen en la capacidad de ver por debajo del suelo, lo que por sí solo plasma un avance sumamente relevante, y en la mayor agilidad y precisión para visualizar toda el área cultivada, como así también en la disminución de uso de insecticidas en los plantíos”, sostiene.
El proyecto piloto está desarrollándose en áreas de plantío comercial de Klabin en Telêmaco Borba (en el estado del Paraná), mediante la utilización de un radar de apertura sintética (SAR). Se pusieron a prueba distintos tipos de vuelos, teniendo en cuenta alteraciones en la posición del radar en el dron para identificar el modelo más asertivo. Se detectaron nidos de hasta cuatro metros de profundidad, lo que indica el éxito de este abordaje.
“El sistema SAR embarcado en un dron recorrió trayectos de vuelos lineales y helicoidales a los efectos de relevar distintas áreas de bosques de eucaliptos. La obtención de información tomográfica de la subsuperficie es posible debido a las trayectorias helicoidales, que permiten que el sistema SAR recolecte datos del área deseada durante el mayor tiempo posible, y a las señales de baja frecuencia, como la banda P, que se encuentra disponible en el sistema SAR utilizado y posee un gran nivel de penetración. De este modo, la información que el sistema SAR obtiene fue procesada mediante el empleo de una técnica de aprendizaje profundo orientado a imágenes, y alcanzó una tasa de detección de hormigueros de un 80 % sin falsas alarmas”, explica Oré Huacles.
Desde el punto de vista técnico, Magro explica que el grado de sofisticación de esta iniciativa es sumamente relevante e innovador para el sector forestal. “Este estudio demuestra la factibilidad del mapeo con radar de apertura sintética para efectuar la detección subterránea de nidos de hormigas cortadoras. Es el primer registro mundial de hormigueros en el subsuelo mediante el empleo de esta tecnología”, afirma.
Klabin posee una de las mayores productividades forestales del mundo para los géneros Eucalyptus y Pinus, con una extensión plantada superior a las 273 mil hectáreas.
*Con información de la Asesoría de Comunicación de Klabin.
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